No es un loco,
no está mal de la cabeza,
no es un
enfermo, aunque su comportamiento nos resulte
irracional, incoherente y enfermizo.
irracional, incoherente y enfermizo.
Es algo muchísimo peor,
es un MALTRATADOR.
Los locos no
seleccionan minuciosamente a sus víctimas,
no planifican al detalle el lugar,
ni el momento de actuar,
ni el momento de actuar,
a veces con una precisión milimétrica,
ni elaboran estrategias de actuación.
ni elaboran estrategias de actuación.
Los locos no traman ni elaboran argucias,
con el fin de descargar toda su ira acumulada.
Los locos no proyectan toda su frustración
contra
una sola persona cuando nadie los ve.
Los locos no saben lo que hacen,
están impulsados por su propia locura;
los maltratadores sí,
ellos actúan motivados por algo muchísimo más grave:
es su propia miseria personal, el machismo y la violencia.
es su propia miseria personal, el machismo y la violencia.