Me encontré esta poesía en la red. Me pareció curiosa y he considerado conveniente insertarla aquí. Mi enhorabuena a la autora.
CONFESIONES
Yo confieso ante Dios todopoderoso
y ante vosotros hermanos que he pecado
mucho de pensamiento, al imaginar
que mi cuerpo era una soga y que con
él jugábamos al ahorcado, pero
siempre faltaba una letra
y me salvaba por casualidad.
De palabra, al hablar de cultura,
de buenas intenciones, de perdón que no de pendón,
de sentirme mujer y reivindicar mis derechos,
de decir amor y no sí mi amo
y de no excavar en la cama mi tumba.
Confieso que he pecado de omisión
por no llamar al 016, ni al 091,
por no llamar a nadie, para que,
no habría servido ni llamar a Dios,
la línea siempre comunica.
Por mi culpa, por tu culpa, por su gran culpa.
Por eso ruego a la justicia siempre ciega,
a los jueces, a los gobernantes y a vosotros
compañeros que no se frivolice más en la tele,
menos anuncio y más leyes y que intercedáis
por mí ante el Dios de la palabra y la poesía.
Como la excomunión la tengo asegurada.
Tened misericordia de mí, perdonad mi pecado
y deseadme una vida plena y sin anuncios
de famosos que no saben lo que hacen.
Así sea.